27.09.2018.- El pasado jueves 20 de septiembre, el Tribunal Oral Penal de Iquique condenó por el delito de secuestro simple a los cuatro ex funcionarios de Carabineros imputados por el Ministerio Público y el Consejo de Defensa del Estado por su responsabilidad en la desaparición de José Vergara, ocurrida hace tres años en Alto Hospicio.
El juicio tuvo lugar tras el fallo de la Corte Suprema del pasado 28 de junio, que acogió los recursos de nulidad interpuestos por la Fiscalía y los querellantes –El CDE, Instituto Nacional de Derechos Humanos y los abogados de la familia– anulando el juicio oral y la sentencia con fecha del 3 de abril del presente año, que condenó a los acusados sólo por el delito de detención ilegal.
“El Consejo esperará la lectura de sentencia del próximo 28 de septiembre y, en función de ello, analizará las acciones a seguir. Sin embargo, valoramos que el Tribunal haya condenado a los ex carabineros involucrados por secuestro, declarando que se apartaron de su deber funcionario, tal como lo hemos sostenido desde el inicio del procedimiento”, señalaron los abogados patrocinantes de la Procuraduría Fiscal del CDE en Iquique.
En su veredicto, los sentenciadores manifestaron que los ex uniformados “se apartaron de su deber funcionario como carabineros, manifestando el dolo común de privarlo de su libertad ambulatoria, trasladándolo encerrado en el furgón policial hasta un lugar distinto de los referidos”. Sin embargo, el Tribunal desestimó la figura de secuestro calificado y absolvió a los imputados del delito de falsificación de instrumento público.
La Fiscalía Regional de Tarapacá solicitó la pena efectiva de cinco años de presidio, considerando la extensión del mal causado, ya que aún se desconoce el paradero de Vergara. La audiencia de comunicación de la sentencia tendrá lugar el 28 de septiembre, a las 13:00 hrs.
Caso José Vergara
José Vergara, joven de Alto Hospicio que padecía de esquizofrenia, fue visto por última vez el 3 de septiembre de 2015, tras ser arrestado por Carabineros, quienes atendieron un llamado de la familia para asistirlos y calmar una crisis producida por su enfermedad.
En el juicio anterior los involucrados fueron condenados por el delito de detención ilegal a una pena de presidio menor de 300 días, 200 días de prisión en grado mínimo y a 41 días de presidio en su grado máximo.
